poema nº 26

Caprichoso Morfeo
Detuvo el tiempo,
Para ti.
Permitiéndote,
Acunarme en tu pecho,
Y con tus dulces palabras,
Convertirme,
En juguete para ti.

poema nº 25

alas rotas,
que alzan su vuelo
hacia ningún lugar,
buscando la sonrisa
que ha dejado de brillar.

lagrimas derramadas,
que nunca,
volverán a brotar,
de los ojos,
de aquella dama,
que se lamenta
de las palabras,
que nunca,
ha podido pronunciar.

poema nº 24

Tú eres aire
Entre mis dedos,
Tú eres luz
En mi oscuridad,
Tú eres el sueño
Con el que sueño,
Y eres la melodía
De mi despertar.

Tú eres silencio
Entre mis palabras,
Tú eres la palabra
Que nunca,
Pude pronunciar,
Tú eres todo
En la palabra nada,
Y en la nada
Todo lo que eres,
Tengo que dejarlo marchar.

poema nº 23

Susúrrame
Y hazme volar,
Por encima
Del firmamento.
Acúname
Entre tus brazos,
Ángel de cristal.
Enséñame
A escuchar,
Tu silencio.

En tus ojos
Quiero navegar,
Y de la cárcel
De tus dedos,
Me hago preso,
De tu lado
No me puedo escapar,
Pues de mi corazón,
Eres ahora dueño.

poema nº 22

Tumbada en el suelo,
Con el manto de estrellas
Frente a mí.
Recuerdo aquellos momentos,
Donde mis pensamientos
Solo eran para ti.

poema nº 21

Hundido en el mar,
Se encuentra
El corazón,
Sin aire
Para respirar,
Sin esperanzas
De ver el sol.

poema nº 20

Condenados bajo un sol,
Destinados a la soledad,
Se encuentra el corazón,
De aquellos,
Que un día,
Se negaron a amar.

poema nº 19

Lagrimas hoy derramo,
Por quien ha robado,
El sentido De mi corazón.
Convirtiéndome,
En un débil humano,
Siendo capaz de robarle
La cordura a la razón.

poema nº 18

Tú, eres como una flor,
Que te marchitas
Y vuelves a crecer,
Que cuando te caes,
Sabes ver el color,
De una sonrisa,
Que te sabe querer.

Nunca, dejes de brillar,
Porque una de tus sonrisas,
Vale más que mil miradas,
Porque un segundo de tu silencio,
Hace callar,
Una eternidad de palabras.

poema nº 17

Ángel que ante mi cama
Te fuiste a posar,
Pensando que eras un sueño
Desee no despertar.

Y como si de una rosa se tratase
Que con dulzura hay que cuidar,
Sobre mis sabanas te posaste
Y de ahí,
Nunca, te dejare marchar.

Y mirándote a los ojos
De los cuales,
Ya no puedo escapar,
Le rogaba al tiempo,
Que se detuviera
En ese lugar.

Poema nº 16

Corazón abandonado
Que vaga por el mar,
Sin nadie que lo acoja
Sin nadie en quien confiar.

Ha sido destrozado,
Por alguien
Que no lo ha sabido cuidar,
Ahora el tiempo
Se hace dueño,
De su largo caminar.

texto nº 1

Rodeada de estas frías cuatro paredes, vuelvo a la rutina de todas las noches, pero hoy con una excepción, esta ahí, mi mirada se cruza con la suya y me siento atrapada, siento como si una fuerza sobrenatural me impulsara, soy incapaz de frenar.

Me siento a su lado y su calor me invade por dentro y eclipsa la frialdad de mi habitación, su aroma se convierte en una droga para mí, que a todas horas deseo poseer. Pero antes de que mi piel roce la suya, le pido al tiempo que se pare, que nada importe ya que para mí lo importante estaba ahí.

Lenta y suavemente mi piel entra en contacto con la suya, siento como mi corazón se acelera, ya no puedo parar. Recorro cada parte de su cuerpo, memorizo cada rincón, ¡Es tan bello! Cada vez voy quedando más hipnotizada. Cada momento que pasa siento más ansias de saborear el néctar de sus labios pero…. No, aun no, es todavía pronto.

Llego hasta su cuello, aquel hermoso lugar que tantas veces e deseado recorrer con mis labios y ahora era la ocasión. Mientras lo beso siento como su piel responde a cada roce de mis labios, como su corazón entra en armonía con el mío. Levanto la mirada y ahí está la suya tan radiante como siempre, me transmite tranquilidad, voy subiendo cada vez más, estoy mas cerca de sus labios, de aquel deseado lugar y noto como el calor de la pasión cada vez es más intensa en mí. Me dirijo a besarle pero… no, su rostro muestra una sonrisa, vuelvo a mirarle a los ojos y esta vez están agotados me ruegan que termine ya, pero no puedo. Me dirijo hacia su oreja, mientras le susurro noto como por fin su cuerpo se hace mío y sus labios sin decir ni una palabra me gritan que los bese.

Ya a acabado la espera, por fin veo cumplido mi deseo, me acerco lentamente mientras percibo su respiración entrecortada y como su aliento recorre cada rincón de mi cuerpo, siento que sus labios son tan frágiles que me da miedo romperlos, pero ya no puedo esperar más. Cada vez mas cerca, los puedo rozar, siento como su corazón esta apunto de estallar y como nuestros labios por fin se van a fundir en una explosión de sentimientos incontrolados cuando……..

Suena el despertador, ¡No puede ser! Miro a mi alrededor y no hay nadie, me siento un juguete en las manos del tiempo, me ha vuelto a engañar. Ahora solo me queda esperar a que aquel hermoso sueño algún día se convierta en realidad.

poema nº 15

Te quiero,
No lo niego,
Pero no lo puedo decir.

Quédate con el misterio,
Que con mi silencio,
Te ago sentir.

poema nº 14

En el jardín de los sentimientos,
Junto a mi esfuerzo
Aprendí a buscar,
Aquella flor que con sus besos,
Tenga el derecho
De poderme conquistar.

Cortándola con cuidado,
Entre mis manos
La empecé a cuidar,
No dejare que se caiga
Y con mis lágrimas,
La comencé a alimentar.

Pero pasaron los días,
Y en mi regazo
Se empezó a marchitar.

Todas las flores entristecieron,
Y el silencio
Invadió el lugar,
Al ver que mi rosa
Aquella flor hermosa,
Dejaba de brillar.

poema nº 13

Caminos entrelazados
Sin ninguna dirección,
Caminante que entre sus brazos
Posee la razón.

Anda sin parar,
Ya que el tiempo
No se detiene,
Pues el misterio
De que pasará,
Se encuentra,
En cada golpe
Que el obtiene.

Y nadie
Lo ha visto parar,
Nada lo detiene,
El coraje es su talismán
Y el amor,
Es la fuerza que lo sostiene.

poema nº 12

Guíame sol
Tú que eres tan sabio,
Hacia los labios
Que me hagan despertar.

Y que junto a su rostro
Cada mañana,
Aprenda el significado
De la palabra amar.

poema nº 11

Tapare los ojos de la ira
Cerrare la boca del rencor,
Le quitare los oídos a la mentira
Le daré vía libre al corazón.

Le pondré alas para que vuele
Y junto a su musa valla a parar,
Para que las heridas le cure
Y con su cariño vuelva a brillar.

poema nº 10

Oscuridad que me rodea,
Que entre sus brazos
Me hace estar.

Espero la mirada,
Que con el silencio
Me solía hablar.

Esa mirada cristalina
Dulce y sin maldad,
Me ayudaba en el camino
Me daba fuerzas para continuar.

Pero una mañana desapareció
Aún no se donde encontrarla,
No conoceré a nadie bajo el sol,
Que me sepa cuidar
Como ella me cuidaba.

poema nº 9

Dama de los infiernos
Que naces para morir,
Dejas que el miedo
Contemple tu vivir.

Victima de las lenguas
Que envenenan tu existir,
Son puras víboras,
Que te muerden
Si tú sentir.

Compañera de los muertos
Aliada de la soledad,
Entre la niebla veo tu cuerpo
Fundirse con la maldad.

Y ahora en el paraíso
Donde siempre has querido estar,
Regresas a por las lenguas
Que un día te hicieron el mal.

poema nº 8

Porque confiar en el cielo
Si nunca conoceremos su final,
Porque fijarnos en una estrella
Si mañana dejara de brillar.

Porque queremos encontrar la salida
Si sabemos, que nunca la vamos a hallar,
Ya que la vida es un laberinto
Del que nunca, nos dejaran escapar.

Porque creemos en nosotros mismo
Si lo único que hacemos es imaginar,
Con una vida llena de sueños
Que nunca, conseguiremos alcanzar.

El mundo esta lleno de mentiras,
Y entre esas mentiras
Hay una gran verdad,
Que la vida te enciende una llama
Que la muerte, se encargara de apagar.

poema nº 7

Una vida llena de sueños
Con un duro despertar,
Y aunque no quiera, debe hacerlo
Pues su camino debe continuar.

Empezando el camino
Y deseando ver el final,
De tan largo destino
Del que no se puede escapar.

El traje, su inseparable compañero
Del que no se puede separar,
El arma, su gran amiga
Que le ayudará a regresar.

Pero los amigos te traicionan
Y a él, le traicionó,
Sus ojos se apagaban
Y con ellos la ilusión.

Una lágrima de cristal se derrama
Escuchando, lo que ya se veía venir,
Dos vidas desamparadas
Sin saber por donde salir,

Porque una vida está naciendo
Como una flor en la madrugada,
Y otra se va perdiendo
Como su cuerpo entre la batalla.

Por fin, llega el fin de su camino
Pero no como él esperaba,
Regresa entre cuatro paredes
Donde ya en tierra,
Su gente le lloraba.